miércoles, 31 de mayo de 2017

EL VALOR DE LA AMISTAD




Debo confesar que llevo unos días bastante cabreado con el concepto de AMISTAD,y la manera en que algunos/as lo utilizan. Estoy demasiado harto de ver como personas,que no hace mucho tiempo, se jactaban de tenerme como amigo, que no podían dejar pasar un minuto sin hablar o compartir algo conmigo, desaparecen sin decir absolutamente nada. Ayer mismo, tuve que tomar una decisión muy dolorosa, expulsar de mi vida a una amiga que,a pesar de no haber podido conocernos personalmente, la consideraba una persona muy especial para mí, nos contábamos nuestras cosas, compartíamos penas y alegrías. Ahora me encuentro con que es incapaz de contestarme a una llamada,a un simple mensaje a través de WhatsApp, el silencio y la indiferencia más absoluta. Comprendo perfectamente que en este mundo tan complejo en el que vivimos, el tiempo no es algo que nos sobre, las circunstancias familiares, el trabajo, pero...¿todo eso puede ser una excusa para no responder a un mensaje a sabiendas de que la otra persona ve que lo estás recibiendo y puedes contestar?

Me indigna profundamente pensar que hay personas que establecen prioridades y etapas de su vida en función de lo que los demás les aportan. Los amigos no son un juguete que podemos utilizar, manipular y tirar a la basura cuando lo creemos inservible. Los AMIGOS se preocupan por tí, por saber como estás, por compartir sus cosas sin recibir absolutamente nada a cambio, por todo ello es injusto el olvido, por muy bien o mal que nos vaya la vida, no puedes ni debes apartar a quienes desean formar parte de ella, nunca la distancia es el olvido, siempre debe haber,al menos, un minuto para dedicarlo a los demás, un saludo, un mínimo gesto de cariño, un recuerdo hacia la persona que está ahí y aporta positivismo a tu vida. Sin embargo, olvidamos con demasiada facilidad, renovamos o desechamos amistades como si de ropa se tratara, somos demasiado egoistas, ingratos, prepotentes, valoramos en demasía el tanto tienes tanto vales, somos profundamente envidiosos, nos acompleja el hecho de que al prójimo le vaya la vida mucho mejor, acotamos nuestro espacio por temor a que nos lo invadan, aún sabiendo que es para llenarlo y enriquecerlo. ¿Porqué los seres humanos somos tan complejos? ¿cual es la barrera que nos impide diferenciar entre conocidos y amigos?

Corren nuevos tiempos, la sociedad ha avanzado,en muchos aspectos,a pasos agigantados, sin embargo seguimos sin tener un claro concepto de lo que significa AMISTAD. La tecnología, internet, redes sociales,etc, ha servido,sin lugar a dudas, para potenciar las relaciones personales y llegar a conocer personas que en otros tiempos era prácticamente imposible. Por otro lado, pecamos en exceso al considerar que las relaciones virtuales se convierten de la noche a la mañana en verdaderos amigos,y no es así. El cara a cara sigue siendo la vara de medir más fiable que nos permite valorar a los demás de cara a compartir una relación más profunda, aunque es innegable que Facebook, Twitter, Skype, WhatsApp,etc, nos ayuda a sobrellevar la distancia cuando el contacto cercano es imposible. Todo esto viene a ser una cuestión de equilibrio, de saber afrontar la vida y elegir adecuadamente a quienes deseamos que formen parte de ella. Todos tenemos que poner nuestro granito de arena, ejercer un papel activo a la hora de  preservar y cuidar a los amigos, estén donde estén, les vaya bien o mal, tenemos que ser especialmente incisivos a la hora de empatizar con circunstancias ajenas, pero lo que no podemos olvidar es que siempre hay un minuto para poder dedicarlo a los demás,es lo mínimo que un amigo,que demuestra quererte, se merece.

Al hilo de todo esto, me gustaría compartir con vosotros, un magnífico artículo de Javier Marías en El País Semanal, espero que os guste y, sobretodo, os ayude a reflexionar sobre vuestras relaciones en el día a día, quizás aún tengamos mucho que aprender y mejorar.

                      LAS AMISTADES DESAPARECIDAS

                                          Ángel Trianero


                                                        

No hay comentarios:

Publicar un comentario